Así, contra River no se sumó un triunfo cualquiera. Porque volvieron a aparecer con brillo protagonistas clave. Barovero, salvo por algún centro aislado, brindó seguridad, Tobio tuvo una gran noche y se destacó atrás, el medio estuvo aceitado y arriba el Burrito Martínez fue el que todos queremos y Silva el de siempre: el de las ganas, el empuje y el olfato. Pero todos esos elogios se potencian más teniendo en cuenta el desarrollo: hubo que batallar contra un equipo que venía invicto pero necesitado de puntos, remontar después del empate de un siempre peligroso Buonanotte, enfrentar a futbolistas con la experiencia de Almeyda y Ortega, superar algunas situaciones calientes y jugar con diez buena parte del complemento.
Ahora sólo queda un partido de la exigente seguidilla que nos había deparado el fixture. Pero claro, para ir frmando una ilusión no hay que prepararse para vencer a los conjuntos importantes, sino a todos. Y en ese sentido, todo indica que se va por la buena senda.
PD: ¡Este partido sí lo pude ver bien! Saludos desde Girona.
Por Marisa Pontieri (TyC Sports).
No hay comentarios:
Publicar un comentario